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Arquitectos: LCA Architetti / luca compri architetti
- Área: 190 m²
- Año: 2019
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Fotografías:Simone Bossi
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Proveedores: Senini
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El edificio es una residencia unifamiliar diseñada específicamente para un arqueólogo. El volumen es un paralelepípedo simple con una base rectangular en el que se han insertado y fijado otros bloques de forma cúbica, completamente cubiertos de piedra.
Desde un punto de vista material, el edificio recuerda a las texturas de ladrillos de las antiguas paredes y las grandes piedras cortadas que a menudo interrumpían el marco como dinteles o piedras angulares.
En esta casa, reemplazamos los ladrillos con bloques de concreto estriados reutilizados y la piedra con losas de mármol y bloques de travertino. El edificio cuenta con dos niveles: en la planta baja hay un salón grande y luminoso con una cocina, un comedor y un baño pequeño; en el piso superior se encuentran los dormitorios, dos baños principales y la oficina privada del cliente.
Todas las ventanas interactúan con el paisaje circundante caracterizado por viñedos y campos cultivados. Los materiales utilizados son todos los materiales recuperados de canteras decomisadas o rellenos sanitarios de materiales de construcción; el edificio también ha sido mejor aislado para reducir el consumo de energía al mínimo.
Desde un punto de vista arquitectónico: queríamos diseñar un edificio contemporáneo reinterpretando el antiguo; queríamos un edificio mineral simple y primitivo capaz de vibrar a la luz de manera diferente por la mañana, al mediodía y por la noche; queríamos recuperar materiales que ya no se usan para darles una nueva vida y reducir las molestias para el medio ambiente; queríamos una casa llena de luz en su interior doméstico.
Simplemente, queríamos donar a nuestro cliente una casa que tuviera su alma y sus pasiones por la historia y la arqueología.